Fragmento de "La milonga Alternativa" del turco Desvarietti.
En la historia de la milonga nunca se recordaran a las parejas de relleno, aquellos típicos bailarines esforzados que, bailando al costado de la pareja principal en películas, anuncios, espectáculos o presentaciones daban lo mejor de si, pero sin opacar a las estrellas.
La historia que hoy nos ocupa podría aplicarse a cualquiera de esos dandys del disimulo que animaron las noches de muchos programas televisivos como obligatorio complemento de cantores en decadencia, sino fuera porque esta pareja era además "Borderline" y mala leche.
Eran Tito y Carmencita Batallan, a quien un malintencionado directivo del viejo canal 7 apodo "Los periféricos".
Cuenta la leyenda que se conocieron en el anuncio de "Chocolatines Jorgito" donde Beba Bidart y Rey Charol se marcaban una "Milonga de mis amores" llena de meneos cumbiamberos mientras cinco parejas vestidas de chocolatines los rodeaban. En ese primigenio anuncio ya se ve además del germen del amor, una insurrección en toda regla. En un momento del anuncio hasta se ve como empujan al pobre Rey Charol, dándole un codazo.
La fábrica de Chocolatines Jorgito cerro dos meses más tarde, posiblemente por esa misma publicidad.
Los Batallan eran sobrinos de un poderosisimo hombre de los medios a quien todos temían(omito aquí su nombre para que sus herederos no me manden a los quebrantahuesos). Este señor, sabedor de la mediocridad artística de sus sobrinos procuró ubicarlos en todos los programas referidos al tango que pudo. Así quedaba bien con su hermana y provocaba dolores de cabeza permanentes en los productores, que no podían echar a sus sobrinos.
En sucesivas ediciones de "Grandes Valores el Tango y la milonga" con el presentador brasilero afincado en La Matanza "Silvinho Soldan" los Batallan hacen lo que mejor saben hacer desde las oscuridades de la pista mientras los pibes Pablito Martin y Claudita Aguayo desgranan su repertorio.
En un momento del programa, trasmitido en directo, se ve claramente como Tito Batallan le toca el culo al pobre gordito Martin que además de desafinar suda copiosamente. Los pobres pibes intentan llegar como pueden hasta el final de "cuartito azul" y apenas terminan salen disparados como Maria Amuchastegui cuando se desgració en cámara. Soldán improvisa una disculpa como puede, mientras los Batallan lucen una gigantesca sonrisa, en sus dominios.
La carrera de los dos pibes se esfumo a partir de ese momento.
Otros cantores que sufrieron el acoso de los Batallan fueron Ricardito Marin y Fabito rey, Juanchi Granelli, Francisco Llanos y Marco Stell, que luego de sufrir un puntinazo en el talón abandonó el mundo del tango y se dedico a actuar en telenovelas.
Pero el más sonado episodio que se asocia con los Batallan tiene como protagonista principal a un oscuro contador de chistes que entonces asomaba como una promesa de la carcajada: Hector
Poncegarré, de nombre artístico Artajerjes, que suplía a Caligula, en baja por caerse de un monopatin de su hijo y fracturarse las dos muñecas.
Artajerjes comienza contar el chiste del guapo que se encuentra con un baño portátil que se mueve cuando desde la frontera y mientras van bailando los Batallan le cuentan el final. Artajerjes le arrebata el peluquín nuevo a Silvinho y con el comienza a correr a la pareja con tal mala fortuna que caen del escenario contra el cortinado trasero.
Resultado: una barahunda fenomenal en el plato: los Batallan y Artajerjes terminan en el hospital con varias fracturas. Silvinho sufre crisis de ansiedad y es hospitalizado, siendo reemplazado por Quique Dapiaggi.
En resumen: los índices de audiencia bajan en picado. En un país transido por los desordenes y la anarquia sembrados desde el club del Clan, ese programa, unificador del pais y la familia no puede permitirse ese escandalo . Esto hace que pocos dias despues el poderosisimo hombre de negocios sea encontrado muerto en extrañisimas circunstancias.
Con la salida del hospital, la realidad artistica de los Batallan ha cambiado.Nadie quiere contratarlos y vagan como proscriptos por espectaculos provinciales hasta pasar a la clandestinidad de las milongas bonaerenses.
Pero estos inadaptados llevan consigo una maldición que comienza a manifestarse en las pistas: aunque comiencen en el centro de la ronda siempre van ladeandose a los lados, para terminar bailando cerca de las mesas y volcando vasos, botellas y platos de milanesa.
Así sufren en sus carnes la venganza del mundo milonguero: cuando se acercan peligrosamente a las mesas heroes anónimos los recogen a botellazos dejándolos posteriormente afuera de las milongas.
Si hemos de creer a los historiadores del tango su ultima aparición en la milonga fue en 1990 ocasión en que volcaron dos mesas y un milonguero dormido.
Los alimentadores de mitos dicen que se desviaron peligrosamente en la "milonga del Oriental" y un tren carguero que circulaba a gran velocidad en la vía aledaña se los llevó puestos.
En cualquiera de los casos su estigma puede verse en muchas milongas de la actualidad bajo la forma de aquellas parejas que a empujones y castigadas van sembrando el pavor adonde van...
Comentarios
Nos quedamos dos dias en Rumipal. Esos Soretes actuaron en Cosquin. Lo peor del caso es que no pude encontrarlos para bajarle los dientes