Malas noticias amigos. Por todos lados nos rodean los agentes de la mala suerte. Durante todo este fin de semana han ocurrido hechos fortuitos que lindan con lo insólito y que nos alejan de nuestro cometido.
El primero de ellos en el casting segundo de operación tanguitos piores, un muchacho, el toba Vieytes, pagó en sus carnes (como bien puede verse en el vídeo) la imprudencia de hacer un número de variedades sin estar preparado.
Ahora evoluciona como puede en la camilla del hospital "Paraguayo Guerrini", a la espera de una intervención que le salve la vida.
El sábado noche la pareja de tango canyengue formada por Nino y Bruna comenzó de repente a bailar tango fantasía y luego a bailar con claros tintes Corchitianos. Se tuvieron que retirar ante la rechifla generalizada de la vieja guardia.
Ese mismo sábado en las clases del maestro Viyela aparecieron dos compadritos, uno de ellos luciendo ostentosamente en su chaqueta una pegatina en la que se veía a Carlitos Gardel. Sospechando que esa pegatina era robada a la puerta de la nave espacial Carlos Gardel 54, un piquete encabezado por Pitón Pipeta siguió a los muchachos hasta un descampado en donde, al quererles inquirir por la pegatina, los dos desaparecieron, confirmando nuestras peores sospechas: Los hercolobusianos están entre nosotros.
Por último y no por eso peor. Se nos cayó Rómulo. Ante la imposibilidad de enviarlo a la NASA para entrenarlo y prepararlo para el viaje espacial habíamos conseguido una centrifugadora industrial en la que lo metimos para comprobar cuantos G era capaz de tolerar impoluto.
No toleró ni siquiera un G y medio. Salio a cuatro patas de la centrifugadora, todo magullado y encomendándose a los profetas de la milonga.
Así que nos hemos quedado sin astronauta.
Y todo en un fin de semana que parecía tranquilo...
El primero de ellos en el casting segundo de operación tanguitos piores, un muchacho, el toba Vieytes, pagó en sus carnes (como bien puede verse en el vídeo) la imprudencia de hacer un número de variedades sin estar preparado.
Ahora evoluciona como puede en la camilla del hospital "Paraguayo Guerrini", a la espera de una intervención que le salve la vida.
El sábado noche la pareja de tango canyengue formada por Nino y Bruna comenzó de repente a bailar tango fantasía y luego a bailar con claros tintes Corchitianos. Se tuvieron que retirar ante la rechifla generalizada de la vieja guardia.
Ese mismo sábado en las clases del maestro Viyela aparecieron dos compadritos, uno de ellos luciendo ostentosamente en su chaqueta una pegatina en la que se veía a Carlitos Gardel. Sospechando que esa pegatina era robada a la puerta de la nave espacial Carlos Gardel 54, un piquete encabezado por Pitón Pipeta siguió a los muchachos hasta un descampado en donde, al quererles inquirir por la pegatina, los dos desaparecieron, confirmando nuestras peores sospechas: Los hercolobusianos están entre nosotros.
Por último y no por eso peor. Se nos cayó Rómulo. Ante la imposibilidad de enviarlo a la NASA para entrenarlo y prepararlo para el viaje espacial habíamos conseguido una centrifugadora industrial en la que lo metimos para comprobar cuantos G era capaz de tolerar impoluto.
No toleró ni siquiera un G y medio. Salio a cuatro patas de la centrifugadora, todo magullado y encomendándose a los profetas de la milonga.
Así que nos hemos quedado sin astronauta.
Y todo en un fin de semana que parecía tranquilo...
Comentarios
..."vení...vení...vení si sos machito...vení..."jajajajajajajajajajajajajajajaja me cague de la risa. Un abrazo paaaapi. Nacho Rosselot+