Inauguramos una nueva seccion que hemos llamado "milongueros en el mundo". Es nuestra intencion que nos hagan llegar los testimonios y sus vivencias milongueras, alli donde esten y allí donde vivan.
Para comenzar la amable carta de Celio Pasuchi, residente en Mongolia.
"Hola queridos amigos de la Bata de Lusiardo, mi nombre es Celio Pasuchi y no tengo nada que ver con el ex jugador de Chacarita y Boca(Aunque jugue algun tiempo en Chaco Forever hasta que se profesionalizaron). Me formé como milonguero en Las milongas de Rosario, pero tuve que emigrar cuando cerraron el frigorifico de enfrente de mi carrito (que además me hacia precio en las hamburguesas y los chorizos).
Por un contacto iba a trabajar para una cadena de heladerias de Rusia pero desgraciadamente el avion en el que viajaba aterrizó de emergencia encima de los montes Altai donde nos dijeron que vendrian a rescatarnos.
Nos rescataron en Yak y como el aeropuerto más cercano estaba en Ulan Bator se ofrecieron a trasladarnos hacia alli.
Desgraciadamente por la ingesta de una bebida mongola a base de leche de Cabra me dieron unas fiebres intestinales que me alejaban cada tanto de la caravana principal.
En uno de esos apretones se levantó un fuerte viento que arrastraba el polvo reseco de la estepa. Guareciendome como podia bajo un matojo achaparrado sortee la tormenta.
Pero la caravana se habia ido.
Sobrevivi a base de unos frutos negros que me dejaban la lengua morada y el paladar insensible.
Al borde la la inanicion me rescato un grupo de nomadas que se desplazaba al festival anual de Tsagaan Sar, o el año nuevo lunar mongol. Estas buenas gentes me acogieron en sus Gerds( las tiendas donde viven) y allí conoci a mi mujer Sorghatani Piki.
Le enseñe lo que sabia de tango. Y como es una mujer seguidora enseguida aprendió los basicos, los ochos y hasta una sacada lateral que me enseñó el pebete Burundi.
Tambien enseño por los asentamientos, pero como son nomades nunca encuentro a los mismos y para enseñarles un simple básico tengo grandes problemas.
Ahora tengo un carrito itinerante donde vendo choripan de bufalo por los tenderios y las ciudades principales. Hemos conseguido que nos permitan montar una milonga todos los veranos en Ulan Bator en la plaza sukhbaatar, al lado de la estatua de Gengis khan. Alli vendo los choripanes y mi mujer pone la música: dos casetes de Racciatti y uno de Marianito Mores que llevaba en el equipaje de mano.
Nunca somos más que cinco parejas pero igual nos divertimos bailando Tanguera que es la que más nos gusta y la que se escucha sin ruido.
En la foto me ven con unas estampas de tango que pinto yo mismo y con las que confio en comprar una compactera y dos Compactos de Chiqui Pereira y uno de Francisco Llanos que vi en una disqueria.
Con un poco de suerte voy a montar el Festival Internacional de Ulan Bator.
Asi que si un dia bajan a Mongolia me encontraran ahi, al lado del parlamento.
felicitaciones por el blog y un fraternal abrazo con choripan de bufalo incluido.
Viva el tango carajo!!!".
Dale Celio, no le aflojes, Y ustedes sigan haciendonos llegar sus cartas y sus experiencias con este mundo tan lindo de la milonga...
Comentarios
Creo que hasta hubo artografo y todo