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CUANDO EL DESTINO NOS ALCANCE

Pitón Pipeta llegó corriendo entre las mesas del Boliche "roñoso", donde solemos pasar las horas muertas jugando al domino cuando la vorágine de nuestro proyecto interestelar nos deja algún tiempo para la distensión. Venia afiebrado, como esos milongueros enamorados a priori de una pebeta, que no aciertan a encontrar el camino para su seducción y se desviven en nerviosismos y pelotudeos varios.
Pero Pitón, que es hombre veterano en amoríos no estaba enamorado, había recibido un extrañisimo sobre hecho de un material que no es de este mundo, la confirmación segura y contundente de un hecho que venimos denunciando desde hace tiempo: No estamos solos, los hercolobusianos vienen por nosotros.
Dentro del sobre, una esquela, una imagen en movimiento; sobre un paisaje imposible, en un rojizo intenso tres personajes que conocemos, saludando con la mano: En Primer plano, sentados Alejandro Latorri y el excampeón interprovincial de truco Tulio Cejeti, muy desmejorado por el trance en el que se encuentra y porque no tiene con el una botella de vino generoso.Hay dos apéndices correosos, que manipulan naipes y que parecen pertenecer a los hercolobusianos. Un poco más atrás, con cara de miedo y sorpresa, Ramiro Croto ve como los dos que están jugando, dejan caer sus cartas sobre la mesa con disgusto. Imposiblemente, se ve que una de las manos correosas pega en lo que parece su frente, un ancho de Espadas.
Lo que parece imposible lo es: Están jugando una partida de truco machazo, y los panfilos de la "Compañía de la Virtud" van perdiendo, como lo atestiguan una especie de porotos que se ven en la plataforma, al costado.
Pensábamos que los Hercolobusianos habían aprendido truco con el borracho, pero no, es una casualidad, un detonante de algo que se venia gestando desde hace tiempo y que cristalizo al ver a Cegeti.
Esto es un golpe durísimo para nuestro ego, ya que siempre presumimos de ser los mejores en todo, pero no. El truco, mal que les pese a los que lean, es un invento extraterrestre que no inventamos.
Esta todo en Internet, para quien quiera verificarlo "eltahuregipcio.anisiris.com" donde se ven diferentes hallazgos arqueologicos que certifican dos cosas
1 - Hemos sido visitados en la antigüedad por alienigenas de distintas clases que conocían el secreto del viaje por el espacio.
2 - Los que nos visitaron sabían jugar al truco.En recientes descubrimientos arqueologicos se ve una estela funeraria donde un egipcio juega al truco con una criatura amorfa que tiene en sus terminaciones tres tablillas, un ancho de bastos, un siete de oros y un dos.
Nuestros visitantes creían que el truco era un vehículo de encuentro intercultural, un embajador de cultura intergalactica que le fue legado junto con otras enseñanzas a Hermes Trimegisto, que no se interesó demasiado por el juego y se dedico a los estudios herméticos, cerrándole toda posibilidad.
Especulamos con que uno de sus ayudantes, un egipciano que viene a ser etimologicamente lo mismo que un gitano nómada, haya podido viajar en una de esas naves de junco que probaba el gringo Heyerdalh y haya recalado en costas pampeanas junto con el secreto del truco.
Otros planetas fueron, según esta tesis, visitados y colonizados por el truco.
Así, según parece, todas las galaxias tienen uno o dos planetas donde se juega al truco y por consiguiente dos o tres campeones.
Al final del mensaje vemos como una de las manos, o lo que sea, acerca a la imagen algo que es una especie de mensaje y que esta completamente escrita en hercolobusiano: No lo comprendemos, pero es Alejandro Latorri, con lágrimas en los ojos quien nos pide encarecidamente que vayamos a rescatarlos y haciéndose portavoz de los alienigenas, nos ruega que pongamos en marcha la Carlos Gardel 54 para asistir a un torneo intergalactico de Truco que se celebrara de aquí a un mes, en el asteroide que nuestros científicos han bautizado como "George Harrison" y que cuenta al parecer con las instalaciones adecuadas para recibir a la miríada de civilizaciones capaces de jugar al truco.
No esta claro ahora de parte de quien viene la invitación, tampoco sabemos cual será el premio para quien gane el campeonato intergalactico, solo que poseeremos un salvoconducto especial: la supervivencia de nuestra pobre tierra. Si ganamos nos salvamos y obtenemos el reconocimiento de nuestros congeneres galacticos, si perdemos toda la gravedad del planeta Hercolobusiano nos caerá encima.

Ante la enormidad de la invitación solo nos queda encontrar rápidamente una pareja capaz de salvar nuestra honra terrícola, y fletarla junto con Romulo papaguachi, hacia el asteroide "George Harrison" donde se celebrará el torneo.
Estamos conmocionados todavía por la noticia. Roguemos a los dioses tauras para que podamos encontrar pronto dos campeones de truco que nos salven...

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