Advertidos por nuestros leyentes sobre la baja e incluso borrosa calidad de las fotografías con las que ilustramos a veces los eventos milongueros a los que asistimos - no nos engañemos, las fotos las efectuamos a través de un móvil ITT-TELEFUNKEN , que adquirió Romulo Papaguachi en una tienda de ultramarinos y que perteneció a un agente de la KGB. - se decidió luego de una disputada contienda por el ultimo trozo de milanesa de una picada del bar "ROÑOSO, que debiamos contratar ateníamos un fotógrafo profesional, o un amateur entusiasta que oficiara de Paparazzi del tango. Un hombre acostumbrado al fasto y el oropel que hasta la más humilde de nuestras milongas esta mostrando. Un eficiente y mundano trabajador de la imagen que además fuera discreto en su labor, y no interrumpiera ese contacto tan intimo que se da entre las parejas que bailan, los que observan y los que se van enturbiando con anestesiantes etilicos para olvidar una decepción, una perdida, un dolor...