El el año 1817 el poeta ingles Samuel Taylor Coleridge acuña una expresión que se hará famosa para justificar las inconsistencias y desvaríos de la obra artística en general dando licencia a quien la disfruta para sumergirse plenamente en el goce estético de la misma sin interrogarse demasiado acerca de la vida amorosa del Dragón de tres patas o el souvenir de perlas de plástico que permite volar ida y vuelta a la luna. Se la conoce comúnmente como la " Suspension voluntaria de la incredulidad" y queda expresada en el siguiente párrafo: "Esta idea dio origen al proyecto de Lyrical Ballads ; en el cual se acordó que debería centrar mi trabajo en personas y personajes sobrenaturales, o al menos novelescos, transfiriendo no obstante a estas sombras de la imaginación, desde nuestra naturaleza interior, el suficiente interés humano como para lograr momentanáneamente la voluntaria suspensión de la incredulidad que constituye la fe poética" ( Samuel Taylor C...