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Acrobacias milongueras en "El Oriental" Por Catulo Bernal

Maestro. Maestro!!!!  - Eran dos y nos miraban Al Filosofo Pelandrun, a mi y a la fuente de papas fritas un poco carbonizadas que la nueva chef y prima del organizador de la Milonga nos habia cocinado con esmero y sin arte. Mire en redor a ver si por un milagro andaba por las inmediaciones el cristo de los evangelios pero aquel hombre santo no se dejaba ver más y su profeta el Pebete Burundi estaba en declive. Aquellos dos vestían trajes de segunda mano con dignidad honrando a los anteriores dueños con su mal gusto. - Diogenes, creo que buscan un concepto, una frase, un catalizador. - Esto de tener discípulos es un incordio. Cuando era un humilde croto de la filosofía me respetaban y se quedaban en silencio meditando sobre mis pensamientos. Ahora no hacen otra cosa que citarme a destiempo. Hasta la estupidez mas grande tiene lugar en su libro de citas. Encima se enojan si no me acuerdo lo que dije. Que se yo cuando  lo dije y porque. Me distraen y no puedo pensar. Bien, aquí lo tien

EL POSIBILITADOR IMPROBABILIPASOS DEL MILONGUERO ALLANDA

Bruno Pureschef era un bailarín malo y lo sabia. Le apodaron ALLANDA una contracción lingüística que expresaba sus innegables falencias para el baile y su situación en la pista porque siempre bailaba  como al fondo y en el centro de un circuito extraño que recorría media ronda  con prisa y casi tropezando. Su baile no Era. Un hecho irrefutable que prescindía de factores externos. No se trataba de indolencia, desidia, enciclopedismo, soberbia o malos profesores. A pesar de sus 4834 clases tomadas y sus 5000 tandas ALLANDA no mejoraba ni entendía el elemental fuego de cobertura que la música debe dar al paso. Ante sus pies se abría el abanico infinito de posibilidades y como intentaba desplegarlo todo junto solo se lo veía como un borrón, una no-sucesión compacta saltando lejos del compás y sutileza. Que en los ratos libres del trabajo farmacéutico, entre las lecturas de Mecánica popular y Lupines el hombre creara pasos ayudado por una escoba no ayudaba. "Si voy por acá y hago

LA VIBRACIÓN DEL MILONGUERO TENSO - Por Catulo Bernal

Me gustan los Tango Maratones. Flota en el aire una concentracion particular que prescinde de los códigos y lo pre establecido. Si viene mucha gente de afuera y los locales se quedan en las milongas habituales, uno  puede sentirse un poco turista  en su ciudad y confundirse en anonimo abrazo con los maratonianos. Si los de siempre se integran,  juegan a sacarse el habito y se distienden mostrandose en horarios diurnos como si milonguearan de entre casa, con zapatillas y en una version menos solemne. Se toman en serio su version pret a porter milongueridad. Quise llevar ese desdoblamiento al maximo invirtiendo unos dineros ganados por textos en cultivar otra personalidad.  Prescindí de ritual y viernes en el "Oriental" dejando a los muchachos la mesa milonguera y a Diogenes Pelandrun, el filosofo mi habitual comentario. No importan la edad, la gravedad y las medallas que te cuelga Ego. Segun Diogenes Pelandrun, algunos días no "ser" es la mejor terapia para el alma.

CREASE O NO de Rintey

Durante los 42 años de su existencia el milonguero  Ramor Gastaldi, cariñosamente llamado Rintey por los amigos se dedico a la misma labor que Robert Ripley, el creador y dibujante de Aunque usted no lo crea. . Rintey, cuyo apodo se debía al perro de un conocido cuya característica principal era pisar sin gracia y con ruido baboseando la cara de quien tuviera cerca, fue recopilando estos datos y hechos curiosos en las milongas, donde para no dar justificacion a su apelativo  se impuso la labor de documentar todas aquellas situaciones, casos o experiencias irreales que veía en las pistas y aledaños. Siempre al costado de la ronda y con un pincel especial confeccionado con pelusa de pista descuidada Rintey ilustraba los "Casos increíbles" que solo el parecía captar en la multiforme noche. Acaso esa capacidad se debía en parte a la absenta de 80 grados que se hacia traer del bar "Limencia", en damajuana de tres litros. O quizá al compuesto base de su celebre  tinta esp

continuidad de los "Sin Parquets" - Por Catulo Bernal

"Puede que Riquelme no vuelva. perdido en misticismo en la montaña.  Pero Milonga El Oriental debe hacerse. Ya no estaran los trucos publicitarios para atraer a los abribocas, los telones con polvo de estrellas ni los focos  que iluminan las luminarias preferentes. No pasara el tren turístico de la milongueridad con su cargamento de bacanes subidos en los caballitos del carrousel tanguero. Tipos y tipas  que salieron esta mañana de una milonga en Ankara para sellarse el pasaporte, pasaron por Paris para hacerse la foto  y a la noche estaran  bailandose un par de tandas aderezadas por sauerkrats y riesling en Franfurt para seguir bailando al amanecer despues de haber desayunado onigiris en el Tsukiyi de Tokio.  Volveran las locomotoras agonizantes y los trenes de carga perdiendose en la noche  No estaran  los reclamos publicitarios del baño en el que un delincuente grafico habia pintado a  Tita Merello como un bombon siliconado y plastico,  a Discepolo  como un rufian de sombria ap

Tangabasis - la retirada de los 10 - Comentario de libros

¡El Croto ha vuelto, el Croto ha vuelto!  gritan los freaks por las calles. La editorial de la extravagancia, el mal gusto y el escritor pudiente de buena familia. La que organiza fiestas editoriales para que sus engendros se conozcan y se amen, lo ha vuelto a hacer. En esta ocasión el resultante es una farsa histórica, copiada, corregida y mal pegada de aquella famosa Anábasis, en donde el historiador y general Jenofonte narra la retirada de 10000 mercenarios griegos atravesando 4000 kilómetros por territorio enemigo hasta llegar a su patria. Pero vayamos por partes que hay mucha pinza en este pantalón y la plancha esta caliente. El autor es, como no podía ser de otra manera, un amigo de la casa, un socio, favorecedor o incluso amante del editor Dalmacio Ganci. Escribe como  Jenofanes Fronte y el mismo Ganci lo prologa entusiasta definiéndolo como un «historiador ameno y costumbrista que nos ha legado dos volúmenes imperdibles E.345  y E.368 catalogo El Croto: CUENTOS HISTÓRICOS PARA

Desescombrando la milonga

Pitón Pipeta vino con la novedad a la mesa remozada del bar Roñoso en donde ocupáramos nuestro tedio pos vermut  jugando a esquivar pataduras y bochincheros en el juego de moda "Milonguero Ninja" que los Mamerces habían adaptado a una vieja mesa de jueguitos electrónicos con palanca y botones para 4 jugadores,  después del re-estreno potente en la noche del lunes de Milonga del Pipa en su nueva locación de "la Yumba". - Cierran MILONGA DEL ORIENTAL.  Martita, que hace Teatro  en el potrero, me acaba de mandar un mensaje.  Dice que en la tranquera de la entrada  hay un cartel explicando que por orden del C.onsorcio I.nternacional M.ilonguero y por culpa de los disidentes tiratomates hasta que no se pueda garantizar la seguridad  de los asistentes y sus ropas de diseño la milonga queda clausurada. - Eso es una excusa. Los tiratomates no han vuelto. Y los toxitangos se han ido junto con los mercaderes del paso a otras milonga apadrinadas. En todo caso creo que lo

MATIAS CARAJETE, EL COMPENSADOR DE LA MILONGA - Una entrevista de Enriquito sacamerdi para LA RECALCADA

La voz metálica  de nuestro jefe tácito Puan Hiriarte me sobresalto saliendo desde el busto en  cobre de Lusiardo mientras afilaba las tijeras peluqueras del Profesor Maradona y arreglaba el enchufe de uno de sus secadores: "Sacamerdi, hay un trabajo para usted. Tiene que entrevistar a un amigo del Filosofo Pelandrun. Encontrara instrucciones en su escritorio y los vales de comida y transporte. No se demore mucho." El  amigo es un tal Matias Carajete, mediador y catalizador energético de la milonga. Como siempre que voy a patinar por el helado borde de la locura me puse ropa abrigada, botas de goma para no resbalar e invocando paciencia  a San Finito Escabiadin me fui a verlo a una lechería nueva que se esta haciendo famosa por servir la merienda casi al pie de la vaca, con unas apetitosas medialunas de alfalfa. Metro, tren y autobús me dejaron casi en la mesa misma del tal Carajete, un hombre flaco y atildado. Literalmente atildado. Tiene  una moneda de cinco guitas clav

COMO AFRONTAR LAS FIESTAS SIN PERDER LA MILONGUERIDAD - Por Nicanor Rumiseldo Paredes (facebuquero senior)

Fiestas. excesos. La milongueridad corre peligro. los convites y los agasajos se suceden sin pausa. Aquí le damos consejos cortos para no quedar como un sanguango y perder  esa aura misteriosa que muchos llaman "Saber estar" 1- Si le es imposible pasar por su casa después del agasajo y antes de la milonga debe ir equipado con un kit de supervivencia en la bolsa de zapatos utilitaria: una camisa arrugable en una bolsa del mercadona, pastillas de menta, calcetines, una toalla, un termo con café y sal. En el bolsillo con cierre del abrigo un par de billetes para imprevistos y su dirección anotada, junto con calles aledañas. Conviene tener un peine y una tirita, idealmente. 2 - Nunca vaya al agasajo estrenando un traje. Conviene que se lleve una chaqueta casi a punto de jubilacion, unos pantalones de tiro alto, con tirantes, para evitar las miasmas del baño y una camisa baqueteada. En estas fechas abundan las salpicaduras y las devoluciones. y si el traje tiene que acunar un ch

El Milonguero que enrollaba inviernos

Llegó "al Oriental" casi con el ultimo tren de la milongueridad turística, cuando apenas quedaban pacs de tango con el emblema del C.I.M.  lamentables bolsitas donde se asfixiaban el choripan recocido, almanaques con postales de milongueros que ya no vienen más y un llavero con zapatos masculinos o femeninos con el insidioso logo del consorcio y el nombre de la milonga apenas sugerido. Cuando se iban los últimos toxi-tangos dejando al borde de la pista su mugre de tarjetas y negocios. Cuando comenzaban los combates en serio en el ring de los "Titanes de la milonga" y los demonios se soltaban por fin, sacudiéndose el almíbar de la pose en épicos contrapuntos de madurez y maña afrontando a la orquesta enlatada con la ventaja de mil tandas repetidas. Traspiraba frío, el  pantalón mojado en los bajos por la lluvia y la inclemencia viniendo a secarse en el calor del micro clima entre el terraplén, bosque y sanja. Con los zapatos de bailar puestos, para ablandarlos pisa

LA MILONGA DE QUICUCHO

Eran unos anfitriones macanudos los Quicuchos. Llegabas temprano a su milonga y te acomodaban en el mejor sitio, hasta que llegaban sus amigos “Los artistas” y Quicucho recordaba que la mesa donde estabas se la había reservado a tal o a cual y casi llorando te decía que lo perdonarás, “Porque vos sabes, ellos lo dan todo por el tango” Y  vos querías decirle: “Yo también Quicucho. Me vengo desde lejos para bailar, aunque mañana trabajo temprano y me dejo el alma en las pistas y la mitad de la plata en la milonga, porque al tango hay que apoyarlo”. Pero el Pobre Quicucho compungido te acomodaba donde podía, al fondo, donde ni la pista se veía, junto con otros milongueros no preferentes.  Pero igual, sonriendo y para tener un detalle con vos te invitaba a comer alguna de las empanaditas que preparaba la Quicucha, que no eran muy sabrosas pero tenían buena pinta. “Te hago precio”  te decía. Y vos, que no tenias mucho hambre sucumbias a la gula y le comías dos o tres de esas co